Esta es una nueva historia de terror recopilada de internet. Espero que sea de su agrado.

Sabia que no seria fácil mi nuevo trabajo ...pero decidí aceptarlo por las facilidades que había.
 Desde el primer día comenzó todo ,cuando llegue me enseñaron el lugar sala a sala y me explicaron mis actividades.

El lugar era una funeraria muy grande y mi actividad principal era supervisar  que la gente saliera y dejará solo al cuerpo, habian ocaciones donde se podían quedar un numero limitado de personas, pero de igual forma todo se debía cerrar a las 11:40 pm. Aún así los familiares podían caminar por los pasillos. Yo creía que todo era simple, ya que no tenía miedo a los muertos. Aunque al final estaría tan equivocado de mi mismo. 

 Mi primer día comenzó sin novedad alguna, segui las intrucciones que me habían encargado y retire a todos a la hora acordada. Me disponía a ir a preparar un cafe pero antes pase al cuarto de las camaras  para ver si había alguna novedad. Un compañeo que estaba ahi me dijo que el solamente cerraba todo y no volvia hasta al amanecer. Durante la primer hora estuve dudoso de hacer ello, mientras pensaba si hacerlo o no, caminaba por todo el lugar para revisar que todo este bien. 

En ello, estaba cruzando por las capilla cuando vi un sombra que atraveso la sala lentamente, mi instinto fue ver que era aquella cosa pues mis trabajos anteriores como velador hacían que por el minimo ruido estuviera en alerta maxima. En ese momento, sentí un miedo que me paralizo enseguida, pero como mi deber era cuidar todo el lugar obtuve valor para continuar, al entrar a la sala solo vi al difunto y a nadie más. Salí y comencé a revisar por el lugar sin ninguna novedad. Regrese un poco aliviado a la sala de personal, me disponía a ponerme mi chamarra cuando de repente escuche un llanto de una mujer.

De un momento a otro pense que se trataba de algún familiar que se quedo encerrado por mi neglicencia en una de las salas, así que fui corriendo hacia el lugar donde provenia el ruido. Entre rapidamente y al revisar el lugar no habia nada. Consternado sobre lo ocurrido pensé rapidamente en ver las camaras de vigilancia las revise por el monitor cada una pero no se podía ver nada, mientras el llanto insesante continuaba. Decidí dejar grabando todas las camara e ir a investigar de nueva cuenta, pero apenas llegaba a la sala el llanto desaparecía como si no hubiera pasado nada. Pero cuando yo me alejaba el llanto continuaba. En esos momento ya me encontraba asustado por no saber que era eso que lloraba.

Regrese a ver las camaras, y revisar momentos antes de que entrará a cada sala y momentos después. De manera increible, encontré algo extraño en una de esas salas, había una persona que se quedaba observando fijamente el féretro, no podía distinguir el rostro solo podía ver por la forma de la silueta que se trataba de una mujer ya adulta con cabello rizado y canoso, ella tenía un vestido negro pero no tenía zapatos y se veía que estaba llorando. En eso en el video apareció el momento en el que yo entraba a revisar pero aquella persona seguía mirando aquel cuerpo.

Al ver tal escena, no tuve otra opción que encerrarme y apagar todas las camaras de aquella sala para solo sentarme a llorar mientras rezaba todas las oraciones que podía recordar.  Ya habían pasado varias horas de aquel suceso y los rayos del sol ya empezaban a salir, los llantos habían cesado así que cumpliendo con mi labor decidi arreglar aquella sala de personal.

Eran las 7 de la mañana cuando mi jefe apareció, yo creo que tan solo verme supuso lo que había pasado ya que el solo me saludo y me pregunto si me iba a quedar ese día. Yo sin dudarlo le dije no, el disculpandose me dijo que de 10 personas que se contrataban solo 2 se quedaban después de los primeros días. Al ver la honestidad del jefe, yo le conté todo lo que me había pasado aquella madrugada. El me dijo que una de las razones por las cuáles dejan apagado las camaras de vigilancia es para evitar ver ese tipo de cosas extrañas que siempre pasaban todas las noches.

Al final, decidí retirarme del lugar sin antes rezar en aquella sala y pedirle descanso eterno aquel difunto. Me acerque un poco y pude reconocer aquel vestido negro que era el mismo que usaba aquella mujer adulta que grabe con la camara de seguridad. Al recordar esos momento decidí abandonar la funeraría y no regresar más.